Restricciones, inquietud, austeridad, todo esto pesa mucho en nuestros corazones y también en los corazones de los más pequeños que esperan las navidades y Reyes con mucha ilusión. Esta es la nueva normalidad y tenemos que adaptarnos, por nosotros y por el bien de nuestros seres queridos.
¡Toca reinventar la Navidad! Se que parece difícil, pero lograr que las navidades de este año estén llenas de la misma magia de siempre, está al alcance de nuestra mano. No perder la magia de nuestras infancias y disfrutar de la magia que podemos ver en los ojos de los más pequeños.